Ante el Trono de Gloria

martes, 24 de febrero de 2015

El recaudador no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: "`Dios, ten piedad de mí, pecador.

"... Pero el recaudador de impuestos, de pie y a cierta distancia, no quería ni siquiera alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el pecho, diciendo: ``Dios, ten piedad de mí, pecador."
Lucas 18:13


No hay comentarios.:

Publicar un comentario